Se acabó lo que se daba: la racha de La Scaloneta, la mejor de la historia

Con la derrota ante Uruguay en La Bombonera, la Selección puso fin a una racha de ocho triunfos seguidos que se convirtió en la mejor de la historia para un equipo campeón del mundo. Y por lejos…

Los ocho éxitos de La Scaloneta post Qatar (2-0 a Panamá, 7-0 a Curaçao, 2-0 a Australia, 2-0 a Indonesia, 1-0 a Ecuador, 3-0 a Bolivia, 1-0 a Paraguay y 2-0 a Perú) superaron con creces la marca anterior, compartida por la Italia campeona en 1938 y el Uruguay del Maracanazo de 1950, ambos con apenas tres victorias consecutivas post coronación mundialista.

Evidentemente no resulta fácil para un campeón del mundo mantener la línea después de los festejos: de las 22 selecciones campeonas de la historia, apenas ocho ganaron en el estreno de su estrella; seis empataron y ocho perdieron su debut post Mundial. El triunfo sobre Panamá en marzo de este año rompió incluso con una seguidilla de seis estrenos agridulces de títulos de campeón. La Francia ganadora en 2018 festejó su título en cancha con un 0-0 ante Alemania por Liga UEFA; Alemania 2014 lo hizo con derrota 2-4 ante Argentina; España 2010 metió un 1-1 con México; Italia 2006 cayó 0-2 con Croacia; Brasil 2002 fue sorprendido 0-1 por Paraguay; y Francia del ’98 empató 2-2 con Australia. Todos los partidos, a excepción del primero, fueron amistosos.

2022, 1986 y 1978

Para comparar la racha de La Scaloneta con nuestra propia historia, la Argentina campeona del ’86 estrenó su título recién un año después y con caída 1-3 ante Italia en un amistoso disputado en Suiza donde, por ejemplo, debutaron Caniggia, Goycochea -insólita reacción en el tercer gol tano-, el Búfalo Funes, el Ruso Sivisky y Hernán Díaz, quien sacó el tiro del descuento, desviado en Maradona y adjudicado al 10.

El equipo del Doctor recién ganó en su cuarto partido como campeón: 3-0 ante Ecuador por la Copa América 1987 con dos de Diego -una gema de tiro libre- y otro de Cani. Si la marca de La Scaloneta fue de ocho triunfos en ocho partidos, la de los cracks del ’86 fue de dos éxitos, un empate y cinco caídas en su inicio como campeones defensores. El segundo peor arranque -de ocho partidos- de la historia, por detrás de la Alemania ganadora en el ’54, que sumó seis derrotas y dos éxitos en su inicio post consagración.

La previa de aquel Argentina-Italia en 1987, con Pelé de invitado.

En cuanto al equipo del ’78, el arranque fue de tres triunfos, tres empates y dos derrotas en sus primeras ocho presentaciones. El estreno fue un 2-1 amistoso sobre Bulgaria con goles del Loco Houseman y Passarella -golazo de penal- en el Monumental en abril del ’79, siendo aquel el quinto partido de Maradona en la Selección. La primera derrota llegó al sexto juego, en la Copa América de ese año, con Bolivia en La Paz y un plantel alternativo. El gol fue de Carlos López, enganche misionero que pasó por Racing, Boca y River.

Invictos: todos abajo del Brasil del ’94

En cuanto a invictos, los ocho partidos sin derrota de la Selección quedaron como cuarta mejor marca de la historia, compartiendo con Italia del ’38 (perdió en su noveno juego un amistoso con Suiza) y Francia ’98 (cayó con Rusia por Eliminatorias de la Eurocopa).

Delante de ellos, la hegemonía brasileña es total: Brasil del ’58 se mantuvo 10 partidos sin perder; el emblemático campeón del ’70 lo hizo por 17 presentaciones; en tanto que el equipo campeón del ’94 alcanzó la marca aparentemente inigualable de 35 juegos. Aunque aquí entran en consideración diferentes perspectivas, dado que la Verdeamarela se ha caracterizado por mandar equipos “B” a diferentes competiciones a lo largo de su historia. O también porque a mediados de siglo eran comunes las giras internaciones, con amistosos entre selecciones y clubes que no cuentan como “oficiales”. En ese sentido, la racha de 35 partidos del equipo de Romario, Bebeto y compañía podría bajar a 23 si se tiene en cuenta la participación en la Copa de Oro de la Concacaf 1996, donde Brasil fue con su Selección Olímpica y perdió la final con México. Así que siendo generosos con los vecinos, la caída que cortó con los 35 de ese equipo de Mario Zagallo (27 triunfos) fue un inesperado 2-4 ante Noruega en Oslo durante mayo del ’97, con unos tales Cafú, Roberto Carlos, Romario y Ronado entre los derrotados.